Los hermanos siempre pelean, tienen riñas, pero se vuelven compañeros de equipo cuando las verdaderas amenazas están en el horizonte. Irak e Iran estuvieron en guerra, pero después se volvieron hermanos de nuevo, tal y como en la situación actual donde Estados Unidos está tratando de invadir Irak. El cambio de polos cambiará la dinámica de la política de forma inmensa. De cualquier modo, esto parece que será una agresión limitada de un país contra otro, al grado de tener fuerzas terrestres solo para pasar revista, ya que el hambre será grande. Iran se estará congelando, no habrá sembradíos para cosechar, y su población estará muriendo. Irak estará más cerca de los volcanes y un polvo infinito, y su gente tosiendo y confundida. Por lo tanto, será la gente de buen corazón entre ellos, los que se reunirán y planearán, ofrecerán manos que ayudan y se desenredaran de los hechos, y esto no lo harán los políticos y tratadores de guerra que andarán entre ellos. Como ellos son en escencia, hermanos, en cultura, en genética y en lenguaje, aquellos que tengan buen corazón en estos dos fuertes países, encontrarán que es fácil trabajar unos con otros.